El vigente campeón del mundo, Lewis Hamilton y su escudería, Mercedes, dominaron la primera toma de contacto del Mundial 2019 en los entrenamientos libres del Gran Premio de Australia, con el británico liderando la primera y el dúo de ‘flechas plateadas’ al frente en la segunda.
El pentacampeón británico regresó al campeonato de la misma forma que se marchó del Gran Premio de Abu Dabi 2018 que cerró la temporada pasada: en el primer puesto, acompañado en el segundo por el alemán Sebastian Vettel (Ferrari) en la primera sesión y por su compañero finlandés Valtteri Bottas en la segunda.
En la primera sesión, Hamilton puso un mejor tiempo de 1:23.599, con los dos Ferrari a menos de una décima -Vettel a 38 milésimas y el monegasco Charles Leclerc, que debuta con la escudería italiana, a 74- y el Red Bull del holandés Max Verstappen a casi dos décimas de diferencia.
El piloto británico amplió aún más la brecha en la segunda tanda, la más similar a las condiciones de la clasificación del sábado en cuanto a la hora y la temperatura -soleada en Melbourne-, cuando su mejor tiempo, de 1:22.600 dejó a casi un segundo al Ferrari de Vettel (873 milésimas), que fue quinto en esta sesión.
Junto a Hamilton, a 48 milésimas, se ubicó Bottas, ambos a una distancia amplia, de 8 décimas, respecto a los dos Red Bull que ocuparon la tercera y cuarta posición en la segunda sesión libre, Verstappen y su compañero francés Pierre Gasly, ambos con el nuevo motor del japonés Honda que utiliza este año la escudería austríaca.
Tras los tres equipos cabeceros se ubicó en ambas sesiones un convidado inesperado: el finlandés Kimi Raikkonen, que esta temporada ha cambiado el Ferrari por su hermano menor, el Alfa Romeo, pero se ubicó como si llevara su anterior monoplaza, sexto tanto en la primera como en la segunda sesión.