Hernández
Foto: @Mariners

El lanzador Félix Hernández tendrá su última presentación con la organización de los Marineros de Seattle este jueves, cuando se enfrente contra los Atléticos de Oakland.

Hernández tuvo cuatro momentos únicos, que cualquier lanzador desearía tener en su carrera.

Juego Perfecto en Seattle

El 15 de agosto de 2012 lanzó contra los Rays de Tampa Bay y alcanzó la perfección. Un hito que desea cualquier serpentinero en su carrera.

En la noche de ese miércoles abanicó a 12 bateadores y dominó a su rival en la mayoría con roletazos. Esa noche el score quedó con diferencia de la mínima.

Ese encuentro fue una muestra de la carrera de Hernández. El marcador finalizó 1-0, irónicamente esa ha sido la historia de El Rey, dejar el juego por la mínima o perderla igual.

Solo 23 juegos perfectos se han dado en la historia de las Grandes Ligas y el último que se registró fue el del diestro.

“Esta es mi casa”

Los Marineros chocaron contra los Azulejos de Toronto en una disputa en la que el Safeco Field fue invadido por los aficionados de los Azulejos, que irrumpieron en la corte de El Rey.

El apoyo que recibió Hernández durante toda su trayectoria cuando jugaba en casa lo hacía sentir cómodo, por lo que esa invasión de la fanaticada de los Azulejos se lo tomó a pecho.

En esa disputa el pitcher tiró 7.0 entradas en blanco y permitió solos dos imparables. Cuando terminó su actuación, justo antes de llegar a la cueva, gritó: “Esta es mi casa”.

Puesto 36 en la historia

A pesar de que el puesto 36 no se ve muy impresionante, el criollo superó a Christy Mathewson en la lista histórica de ponches con 2.509.

En la actualidad el valenciano posee 2.521 abanicados y está a 15 de Bartolo Colón, que se ubica en la plaza 35.

Hernández logró el hito luego de regresar de una lesión que lo alejó del campo del juego por varios meses. Tuvo que pasar por una larga rehabilitación y volver a la MLB para lograr esa cifra y fue un momento emotivo para él.

Cy Young a cargo

La temporada de 2010 tuvo un aroma especial para el as de los Marineros. Ganó el premio Cy Young con foja de 13 ganados y 12 perdidos, efectividad de 2.27 con 232 ponches.

Aunque logró el galardón, el primero y único de su carrera, para muchos periodistas fue una recompensa directa por no salir ganador en 2009, la mejor de su paso por las Grandes Ligas.

Ese año tuvo 19-5 con efectividad de 2.49 y 217 ponches. Una temporada que si alguien la tiene en esta campaña sería el ganador del Cy Young de forma unánime.


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