El colombiano James Rodríguez, quien tuvo que abandonar el Real Madrid el pasado mes de agosto para buscar tiempo de juego en el Bayern de Múnich, aseguró este lunes que no siente «rabia» contra el que fuera su entrenador en el equipo blanco Zinedine Zidane, en la víspera del partido de vuelta de semifinales de la Liga de Campeones.
«No tengo absolutamente nada (contra Zidane), no son sentimientos de rabia, ni de querer poder ganar contra él. Solo quiero hacer un muy buen partido, quiero que el Bayern Múnich pase esta fase, queremos jugar la gran final», declaró el centrocampista colombiano, cuyo equipo tratará de remontar en el Bernabéu el 2-1 del Real Madrid en Alemania. «No tengo nada contra él ni el club tampoco, solo sentimientos de gratitud. Mañana quiero hacer un gran partido, nada más», insistió.
Será la primera vez que Rodríguez vuelva a pisar el estadio Santiago Bernabéu y se enfrente a su ex equipo: «Es algo lindo estar aquí otra vez, después de justo un año, fue mi último juego aquí, siempre es lindo volver donde fue tu casa tres años».
«Es una mezcla de sentimientos lindos hacia este campo, esta ciudad. Estuve aquí bien, me trataron bien, siempre quise estar aquí, fueron tres años únicos, conseguí títulos, pude prácticamente ganarlo todo, es cuestión de respeto hacia toda esta gente», añadió cuando fue preguntado si celebraría un gol en el estadio blanco.
Sobre su estancia en el Real Madrid, James admitió: «Cuando tuve opotunidades de jugar hice cosas buenas, goles, pases (…). El primer año es verdad que pude jugar siempre, cuando juegas más tienes más chances de poder hacer goles, más números. Cuando juegas menos, estas posibilidades son menos».
La estrella colombiana aclaró, no obstante, que «nadie tiene culpa» de su marcha de Madrid, aunque matizó: «No tengo que demostrar nada a nadie, mi presente es el Bayern, estoy bien, estoy feliz y pienso en hacer buena Copa del Mundo».