Las emociones en el Juego de las Estrellas 90 no pasaron solamente por los batazos, las atrapadas y los ponches. El clásico de mitad de temporada también tuvo su momento emotivo al recordar a los que luchan por cáncer, como parte de una campaña para combatir a la penosa enfermedad que mantiene desde 2008 la MLB junto a la compañía financiera Mastercard.
Este año, el blanco de las miradas y los apoyos fue el lanzador venezolano Carlos Carrasco, quien anunció la semana pasada que padecía un tipo de leucemia que lo mantiene alejado de los diamantes. Durante el choque entre la Americana y la Nacional los aficionados que suelen apoyar sus actuaciones en la lomita con los Indios le dieron ánimo al sostener carteles alusivos a los valientes que batallan contra el cáncer, al igual que sus compañeros, quienes le dieron más de una muestra de cariño y respaldo.
Carrasco, de 32 años de edad, le dijo el fin de semana pasado a un canal dominicano que tiene la enfermedad, aunque aseguró que la tiene controlada y aspira regresar a la acción antes de fin de mes. El venezolano señaló que tiene previsto volver más fuerte al vencer el mal.
El pitcher larense tiene prevista una rueda de prensa esta semana para dar más detalles sobre su salud y su recuperación. Carrasco tenía marca de 4-6 con 4.98 de efectividad en sus primeras 12 salidas. Ese inusual desempeño hizo que la tribu buscara razones físicas para explicar su bajo rendimiento en la lomita y encontró en los estudios los problemas en la sangre del serpentinero.
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