En uno de tantos debates interminables, aunque no menos divertidos y reconfortantes a través del twitter, convenimos una vez más y por siempre, que en el beisbol no tiene cabida la expresión “nunca jamás”.
Si existe la posibilidad de que ocurra, en cualquier momento sucederá. Por lo tanto queridos amigos, debemos prepararnos para que la nueva temporada de Grandes Ligas con todas sus potencialidades, no nos sorprenda fuera de base.
La eventualidad de hechos “extraordinarios”, eternamente estará a la vuelta de la esquina. Y ante la diversidad de acontecimientos que pueden presentarse, vamos a ofrecer un inventario de eventos susceptibles de repetirse u ofrecerse por primera vez, aún cuando ya transcurrió la primera semana de acción de la campaña 2018 en las mayores. Tanto colectivas como individuales. El tiempo está de nuestro lado si de echar a volar la imaginación se trata.
A ver. José Altuve, el camarero venezolano de los Astros de Houston, se erigió como líder bate de la Liga Americana en 2016 y 2017. De repetir, Altuve sería el primero desde su compatriota Miguel Cabrera en sumar tres coronas al hilo en esta categoría. El toletero de los Tigres de Detroit lo hizo entre 2011 y 2013. El tope son los nueve títulos corridos de Ty Cobb, jardinero de los Tigres, de 1907 a 1915, marca también para ambas ligas.
Ahora vamos con un pormenor histórico en el entorno colectivo. Si los Dodgers de Los Ángeles en la Nacionaly los Astros en la Americana, repiten sus banderines de la temporada pasada, serían los primeros conjuntos en volver a ganar desde que los Reales de Kansas City lo hicieron en la Americana en 2014 y 2015. Pero eso no es nada.
¿Sabían que en la Americana en las temporadas transcurridas entre 1981 y 1988 se proclamaron campeones ocho escuadras distintas? Los Yanquis de Nueve York, los Cerveceros de Milwaukee, los Orioles de Baltimore, los Tigres de Detroit, los Reales de Kansas City, los Medias Rojas de Boston, los Mellizos de Minnesota y los Atléticos de Oakland. Lo mismo pasó en la Nacional de 1998 a 2005, ocho años que vieron titularse a los Padres de San Diego, los Bravos de Atlanta, los Mets de Nueva York, los Cascabeles de Arizona, los Gigantes de San Francisco, los Marlins de Florida, los Cardenales de San Luis y los Astros de Houston. Semejante cadena solo se ha visto, en estas dos ocasiones, en las memorias centenarias de la gran carpa. Ah, y si los Astros o los Dodgers regresan a la Serie Mundial, habrán dado un breve paso hacia la marca de más gallardetes uno tras otro para una sola novena. Es de cinco y pertenece a los Yanquis en la Americana durante dos oportunidades, a través de 1949 y 1953, y luego de 1960 y 1964. En la Nacional es de cuatro acumuladas por los Gigantes de Nueva York entre 1921 y 1924.
Aquí tienen otra coyuntura memorable. En realidad no está muy lejana en el tiempo. El último bateador en repetir gemas jonroneras fue Nolan Arenado, antesalista de los Rockies de Colorado. Arenado dominó a la Liga Nacional en 2015 y 2016 con 42 y 41 vuelacercas. La opción de imitar a Arenado en 2018 recae en los bates de Giancarlo Stanton y de Aaron Judge, quienes encabezaron a la Nacional y a la Americana la temporada anterior con 59 y 52 estacazos. Solo que ahora ambos estarán en la Americana y en el mismo equipo, los Yanquis. Asimismo están muy lejos de la seguidilla más extensa de cimas del poder, en manos de Ralph Kiner. Un toletero derecho de los Piratas de Pittsburgh, Kiner comandó a la Nacional a lo largo de siete temporadas entre 1946 y 1952.
De alguna manera, los ponches propinados por el lanzador son el equivalente a los jonrones. Max Scherzer, de los Nacionales de Washington, ha sido el número uno de la Nacional en las dos campañas previas con 284 y 268 bateadores anestesiados con sus envíos. Si consigue repetir en ese departamento, Scherzer se uniría a Tim Lincecum y al venezolano Johan Santana, los últimos en hilvanar una cadena de tres topes. Lincecum en la Nacional con los Gigantes de 2008 a 2010, y Santana en la Americana con los Mellizos a través de 2004 y 2006.
Bueno, es todo por hoy.. Material de sobra hay. En cualquier momento retomaremos el tema.
El dato
José Altuve puede emular a Miguel Cabrera. ¿Sabe usted cómo lo haría?