La selección nacional de baloncesto cayó a manos de Canadá y se despidió del torneo en el que buscaba revalidar el título continental. La convicción, el ímpetu y la entrega en la cancha no fueron suficientes para que Venezuela pudiera avanzar de ronda y se quedara en el camino en la Americup 2017.
Los dirigidos por Nestor “Che” García fueron derrotados por el combinado de Canadá 75-66 en partido en el que la única opción era vencer si se quería seguir con opciones clasificatorias al Final Four. No fue así. El conjunto nacional falló en el intento de revalidar el título conquistado en territorio mexicano en 2015, y se despide con una actuación gris, con solo una victoria en tres presentaciones.
El formato de este nuevo sistema empleado por FIBA para conocer a la mejor selección del continente parecía beneficiar a Venezuela; aun así, no le pudo sacar provecho sino que salió perjudicada.
Las ausencias fueron notables, sobre todo después de la lesión del capitán José Vargas, que lo apartó del torneo, y las dolencias que presentó otro pilar del quinteto criollo, su hermano Gregory.
Con todas esas vicisitudes, el Che logró conformar un equipo contendor y duro adversario, tanto que en los tres partidos que disputaron las posibilidades de victoria siempre estuvieron presentes.
En concordancia con lo realizado en los dos primeros desafíos contra Argentina e Islas Vírgenes, en el de ayer Venezuela tuvo la iniciativa desde el primer parcial del encuentro, que ganó 16 a13.
Para el segundo cuarto se presentó un duelo de alternativas, con rachas de puntos de parte y parte. Canadá reaccionó rápido y logró ponerse al frente, aunque la vinotinto de las alturas nunca permitió que colgaran una ventaja amplia. El descanso llegó y la ventaja a favor de los norteamericanos era mínima (29-27).
En el tercer período la paridad se mantenía, de tal manera que el lapso finalizó con la pizarra igualada 48 a 48 y todo se definiría en los diez minutos finales, en los que a Venezuela el desgaste físico le pasó factura y terminó cediendo con el cuarto más flojo en lo defensivo de toda la copa (18-27) y, por ende, la derrota se hizo inminente.
Inesperadamente el resultado del encuentro terminó otorgándole a la selección de Islas Vírgenes el boleto al Final Four, gracias a exhibir un mejor coeficiente de puntos.
Tras el partido se conoció que el Ché tuvo que apartarse del cargo como entrenador, debido a sus compromisos con su nuevo club en España.
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