“Aún siento algo de responsabilidad por su muerte. Yo era uno de los jefes del equipo de diseño del vehículo en el que se mató un gran hombre”, expresó Adrián Newey, jefe del equipo del bólido en el que se estrelló Senna.
La trágica muerte de quien es considerado el piloto más atrevido, rápido y feroz de la F1 se determinó que fue por la por una ruptura de la columna de dirección del vehículo FW16.
Senna, de 34 años de edad, perdió el control del monoplaza a 200 kph. Una pieza del auto impactó en la cabeza del brasileño ocasionándole la muerte.
“Lo que pasó ese día, aún después de todo este tiempo, todavía me persigue. Pero eso sí, aunque me siento responsable, no me siento culpable de ello”, comentó Newey.
El automovilista sufrió el accidente en la séptima vuelta de la competencia, iba liderando la carrera y en la curva de Tamburello el vehículo Williams pasó factura por su diseño.
Senna fue campeón mundial en tres ocasiones, condujo para Toleman, Lotus, McLaren y Williams, terminó su trayectoria con 41 victorias, 80 podios, 65 Poles y 19 vueltas rápidas.
Tributo en el Mundial de Fútbol 1994
La selección de fútbol de Brasil se proclamó campeona en el Mundial de 1994, el 17 de julio frente a la oncena de Italia. La Canarhina venció a los italianos en la tanda de penaltis (3)–(2).
Durante la celebración el combinado brasileño sacó una bandera en la que se reflejaba la imagen de Ayrton Senna.
El piloto fue en su momento más popular que la escuadra que poseía nombres como: Romario, Cafú, Dunga…
Johnny Cecotto y Ayrton Senna
El venezolano que posó a la izquierda de Senna, fue uno de los compañeros más veloces que tuvo el brasileño en su carrera
El venezolano Johnny Cecotto fue compañero de escudería con Ayrton Senna. En 1984 Senna haría su debut en el Gran Premio de Brasil, teniendo como compañero a Cecotto.
“Entre mis compañeros Johnny Cecotto ha sido el que mayormente más me ha exigido en el plano del desempeño puro”, expresó Senna sobre el venezolano en 1992.
Sin embargo, antes de esas declaraciones, Cecotto llegó a creer que Senna pensaba distinto por sus acciones.
“Al inicio la relación era buena, cercana, andábamos juntos. Después, probamos una vez el mismo coche, en Donington, y yo fui un poco más rápido. Él no se puso contento y, pese a que era el primer piloto, a partir de ese día la relación se volvió más difícil”, comentó el venezolano a UOL Deporte.
Cecotto era segundo en la escudería Toleman, mientras que todos los privilegios los tenía el considerado piloto más audaz de la F1.
“Él tenía el motor nuevo, del año, con inyección electrónica. La mía era mecánica, del año anterior. Él hacía todas las pruebas, yo no probaba nunca”, relató el piloto, según la página portalautomotriz.
y continuó: “Había diferencia de potencia y velocidad, que eran menores en mi coche. Todo giraba alrededor de él. Era su forma de ser, quería el equipo para él. Pero creo que, para un piloto que quiere ser campeón, es bastante normal”.
La vuelta que demostró de lo que era capaz Senna
El brasileño en la carrera de Donnintong Park en 1993 arrancó cuarto y terminó ganando la competencia al mostrar su gallardía a pesar que la pista estuviese mojada por el diluvio que caía ese día.
Senna, al comienzo de la carrera, fue pasado por Michael Schumacher, que lo dejó quinto en la tabla de posiciones. Al transcurrir algunas vueltas el brasileño comenzó a acortar distancias.
Los demás pilotos mantenían cierta precaución por la pista húmeda y la lluvia que caía ese 11 de abril. Senna logró conseguir el ritmo y fue rebasando a sus contrincantes hasta que cruzó la meta mientras ondeaba la bandera de cuadros.
Para muchos pilotos la carrera se tuvo que haber detenido, pero solo los grandes son capaces de hacerse de la victoria frente a las adversidades.
Rey de Mónaco
El piloto logró conquistar la pista de Mónaco a placer. Tiene el récord de más victorias en el callejero de Montecarlo con seis y es, sin duda, el corredor más audaz que tuvo la famosa pista.
Los periodistas especializados en el motor dicen que si te consideras un campeón de verdad debes triunfar en Mónaco, algo que a los corredores les cuesta por las estrechas curvas y la reducción de errores.
El Rey de Mónaco se impuso por cinco competencias consecutivas alargando su leyenda y ganándose ese seudónimo.
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