
Andrés Iniesta, histórico futbolista del Barcelona y la selección española, abrió su corazón y en un crudo relato narró los duros momentos que vivió cuando tuvo depresión.
El jugador del Vissel Kobe de Japón conversó en el podcast The Wild Project e hizo potentes confesiones.
Todo se intensificó post 2009, año en el que su amigo, el jugador del Espanyol Dani Jarque, falleció por un infarto a los 26 años.
«No tenía ganas de vivir. Era mi cuerpo pero porque tenía que existir. No tenía esa alegría o energía que tiene que tener la vida. Te hacen pruebas y estás bien pero tu notas que algo no funciona. Te metes en tu cuerpo y tu mente, donde todo lo ves negro. Deseaba que llegase la noche para tomarme mi pastilla y descansar. Ese era el momento de más placer», comenzó.
Iniesta siguió: «Estaba en mi casa con mi novia en el sofá pero era como abrazar una almohada. O estaba con mis padres y era igual. Y no es estar triste por haber perdido un partido, porque te ha dejado tu novia o porque un amigo te ha discutido. Es otra cosa. Hasta que no lo vives y lo sientes no lo puedes comprender».
En esa época, el volante comenzó tratándose con los sicólogos del Barcelona, pero ahora reveló que sigue asistiendo a terapia.
«Sigo yendo a terapia porque necesito arreglarme conmigo mismo. Me gusta escuchar a los profesionales hablar sobre enfermedades mentales y depresión. Con el tiempo, la vida te enseña que la depresión y las enfermedades mentales pueden afectar a cualquiera».
Iniesta cerró: «No se trata de cosas materiales. Puedo tener todos los autos del mundo y todo lo que quiera, pero aun así es difícil enfrentar los problemas de la vida. Es un proceso diario».
Noticias Relacionadas
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional