La viruela del mono es una enfermedad que se ha registrado principalmente en África Central y Occidental, pero los recientes casos en países como Reino Unidos, España, Portugal y Estados Unidos ha encendido las alarmas de la Organización Mundial de la Salud.
Esta enfermedad se transmite por el contacto cercano de personas con animales salvajes infectados o de personas a persona a través de los fluidos corporales.
La viruela del mono y la viruela humana tienen una procedencia diferente, según lo explica el epidemiólogo Christian Mejía, docente del programa de Medicina Humana de la Universidad Norbert Wiener.
«Una de las primeras diferencias es sobre la procedencia del virus que, si bien no es el de la viruela humana, se parece mucho. Cabe señalar que, posiblemente, el virus se originó por el contacto y/o consumo de la carne de monos en el Congo, alrededor de 1970», señaló Mejía.
Aunque los síntomas de la viruela símica y la viruela humana son similares, los del primer tipo son usualmente más leves. Según indicó el epidemiólogo, la inflamación de los ganglios linfáticos es un síntoma que no tiene la viruela humana.
«Si bien en ambos casos se dan los síntomas generales como la fiebre, malestar y fatiga, la viruela del mono genera una inflamación de los ganglios. Finalmente, es preciso mencionar que la viruela humana ya fue erradicada, pero la viruela del mono aún es frecuente en muchos países de África, por ello, afecta sobre todo a quienes no están vacunados contra la viruela humana», explicó el especialista.
Actualmente no existe una vacuna contra la viruela del mono, sin embargo, la OMS señala que la vacuna contra la viruela humana ha mostrado una eficacia de 85% contra la viruela símica, esto debido a que los virus que ocasionan ambas enfermedades son similares.
Sin embargo, la vacuna antivariólica no está actualmente disponible para las personas debido a que su producción se suspendió desde 1980 tras la erradicación mundial de la viruela.