El petróleo domina la economía de Venezuela y representa prácticamente la totalidad de sus ingresos de exportación.
Pero, en la última década, la producción de petróleo se ha desplomado y el país se encuentra en una profunda crisis económica.
Y, recientemente, Estados Unidos impuso fuertes sanciones a la industria petrolera de Venezuela para presionar por la renuncia de Nicolás Maduro a la presidencia.
Así las cosas, ¿cuál es el impacto de las sanciones y quién está comprando el petróleo venezolano hoy en día?
¿Qué efecto tienen las sanciones?
Las sanciones impiden que las empresas estadounidenses hagan negocios con la empresa petrolera estatal de Venezuela, Pdvsa, y congelan los activos de esta compañía en Estados Unidos.
Estas medidas no eliminan completamente las importaciones, pero sí requieren que los pagos se realicen en cuentas a las que Pdvsa no puede acceder.
Foto: GETTY IMAGES
Analistas consultados por BBC Mundo dicen que debido a las sanciones, el oficialismo no tiene cómo beneficiarse de las ventas de petróleo a Estados Unidos, porque no puede tocar el dinero.
Y las sanciones también afectan el acceso a los químicos requeridos para procesar el petróleo.
El crudo pesado de Venezuela es casi sólido cuando sale del suelo, por lo que no puede fluir a través de tuberías.
Necesita químicos disolventes como la nafta para convertirse en una sustancia más liviana que se pueda exportar, pero las sanciones no permiten su exportación por parte de empresas estadounidenses.
Parece ser que la firma rusa Rosneft está ahora exportando este material a Venezuela.
La industria petrolera suministra 96% de los ingresos del país | AFP
¿A dónde va el petróleo de Venezuela ahora?
Según la firma Kpler, actualmente hay busques petroleros con una capacidad de 10 millones de barriles de petróleo varados frente a las costas venezolanas.
Originalmente estaban destinados a Estados Unidos, pero ahora están inmovilizados como consecuencia de las sanciones.
Nicolás Maduro ha estado buscando nuevos compradores de petróleo y dice que quiere duplicar los envíos a la India.
Pero aunque ha habido un aumento en las exportaciones a la India, ese no es un incremento sustancial, dice el analista de petróleo crudo Samah Ahmed.
Las exportaciones a China tampoco son alentadoras, y de hecho han disminuido a raíz del declive general de la producción de petróleo en Venezuela.
Vender más petróleo en Asia también aumentaría los costes de transporte, ya que los puertos en Venezuela no están bien equipados para cargar camiones cisterna que puedan viajar largas distancias.
Aun así existe una gran demanda de crudo pesado como el que se encuentra en Venezuela.
Ahora mismo hay una escasez mundial de petróleo debido a las sanciones al crudo iraní, mientras que los niveles más bajos de producción en Canadá, México y los países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) también han impactado la reserva global.
Los importadores estadounidenses deberán encontrar nuevos proveedores de crudo pesado, que se utiliza para producir diesel y combustible para aviones.
«La crisis venezolana ha hecho que el crudo pesado sea más caro para Estados Unidos», dice la analista Paola Rodriguez-Masiu de la consultora de petróleo y gas Rystad Energy.
Pero esto no ayudará a una Venezuela desesperada por encontrar nuevos mercados para su petróleo en un momento de gran crisis económica y política.
Parece ser que las sanciones seguirán golpeando duramente al país.