Se dice que es uno de los hallazgos más grandes y más importantes de los últimos años.
Son 20 sarcófagos humanos que aún conservan sus coloridas decoraciones e inscripciones y aún están sellados.
Como anunció el ministerio de Antigüedades de Egipto, los sarcófagos fueron descubiertos cerca de la ciudad de Luxor, en la necrópolis tebana de Asasif, en la ribera occidental del rio Nilo.
Según el organismo, fueron hallados en dos capas, con los que estaban en la capa superior atravesados sobre aquéllos en la capa inferior.
El ministerio indicó que se darán más detalles del hallazgo en una conferencia de prensa el próximo sábado.
El martes el organismo tuiteó imágenes de «los sarcófagos intactos y sellados».
Indicó que los sarcófagos todavía mantienen sus tallas originales de rostros y manos y sus colores rojo, verde, blanco y negro no se han desteñido mucho con el tiempo.
Los funcionarios egipcios no informaron de qué período datan los sarcófagos, pero el sitio donde fueron descubiertos fue una vez parte de la antigua ciudad de Tebas, la capital real del antiguo Egipto.
La mayoría de las tumbas en Asasif, que está cerca del Valle de los Reyes, son del Período Tardío (664-332 a.C) del antiguo Egipto.
Sin embargo, allí también hay tumbas de la anterior Dinastía XVIII (1550-1292 a.C), que fue la primera del Imperio Nuevo e incluye a los famosos faraones Ahmose, Hatshepsut, Thutmose III, Amenhotep III, Akenatón y Tutankamón.
Hace unos días el ministerio de Antigüedades anunció que los arqueólogos habían descubierto una antigua «área industrial» en el Valle Occidental de Luxor.
El área incluía «casas para almacenamiento y la limpieza de muebles funerarios, con muchas piezas de cerámica que datan de la Dinastía XVIII», afirmaba.
Desde diciembre de 2017, se está llevando a cabo una misión arqueológica en el Valle de los Reyes, dijo el ministerio.
Los planes incluyen buscar las tumbas de la reina Nefertiti -la viuda del rey Tutankamón- y su hija.
También se está buscando las sepulturas de tres grandes faraones, Ramses VIII, Thutmose II y Amenhotep.