No quedó cerca de los puestos de vanguardia, en la final del salto con garrocha en la Liga de Diamante, pero la venezolana Robeilys Peinado tuvo muchas razones para celebrar.
Su paso por la competencia de Bélgica le deparó varias satisfacciones el viernes con un solo salto: el que le permitió superar la varilla puesta a 4,70 metros.
Con eso consiguió varias cosas. Recuperó la confianza en sí misma, pues tenía un año sin conseguir esa altura. Es su tope personal y lo había logrado hace más de un año, en los Juegos Suramericanos de Cochabamba. Desde entonces, los problemas técnicos le habían impedido igualarlo.
También es esa la marca mínima para clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Así, Peinado es la segunda atleta venezolana que asegura su presencia en la cita, tras Yulimar Rojas.
Los de Tokio son los segundos Juegos Olímpicos adultos a los que la caraqueña de 21 años de edad consigue clasificar. Sin embargo, serían los primeros en los que compita. Una terrible lesión en los entrenamientos en Río de Janeiro la privó de hacer su debut en 2016.
En Bruselas Robeilys Peinado no pudo saltar 4,77 y se despidió de las posibilidades de subir al podio. Terminó quinta entre 13 competidoras en la prueba que dominó sin problemas la griega Katerina Stefanidi (4,83m).
A la final de la Liga de Diamante se clasificó por ser séptima en el ranking de la competencia y a pesar de que en la última válida, en Birmingham, no pudo puntuar.
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