El infielder venezolano Wilmer Flores coronó el miércoles con un hit decisivo la victoria de sus Diamondbacks de Arizona y su propia reacción con el madero en estos últimos días, en medio de una cosecha ofensiva que le ha devuelto la titularidad.
Flores está encendido. El martes sacudió un feroz jonrón en línea por la izquierda, en el Tropicana Field, y un día después conectó el imparable en el inning 13 que llevó al plato con la carrera del triunfo a su compatriota Eduardo Escobar.
El antiguo prospecto número uno de los Mets de Nueva York bateaba para .203 el 25 de abril y comenzó a quedar con alguna frecuencia en la banca de los desérticos, mientras el equipo buscaba alternativas en la intermedia y la inicial, sus principales posiciones.
El jugador nacido en Valencia ha conectado 11 cohetes en sus siguientes 28 turnos, para mejorar a .269 y asegurar nuevamente su sitio en el lineup diario.
Flores batea para .393 en ese lapso. En sus últimos seis choques ha sumados dos tubeyes y ha duplicado en cuatro de los últimos cinco choques que ha iniciado.
En mayo tiene promedios de .360/.360/.560, con .920 de OPS.
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