ONU Mujeres y la Oficina en México del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ONU-DH) condenaron hoy el asesinato de Mara Fernanda Castilla, del que es sospechoso un conductor de Cabify, y pidieron una investigación con perspectiva de género, así como evitar estigmatizar a la víctima.
En un comunicado conjunto, ambas instituciones expresaron su “profundo dolor e indignación por el feminicidio” de la joven de 19 años, quien desapareció en el céntrico estado de Puebla la madrugada del 8 de septiembre tras tomar un Cabify y su cuerpo fue descubierto una semana después abandonado en un barranco.
Pidieron que las autoridades lleven a cabo una indagatoria “efectiva bajo los estándares de debida diligencia y con perspectiva de género de la desaparición y el feminicidio”.
Y que se haga, agregaron, “garantizando el agotamiento de todas las posibilidades respecto de la autoría y motivos del crimen” -por el que hay un detenido, el conductor del Cabify en cuestión- y evitando en todo momento la estigmatización de la víctima.
En este sentido, las instituciones afirmaron que la estigmatización de las víctimas de este tipo de violencia es una muestra “tangible” de los estereotipos de género que permanecen contra las mujeres y niñas.
ONU Mujeres y ONU-DH alertaron que el crimen se da en un “contexto de extrema preocupación” por la desaparición de mujeres en Puebla, donde hay al menos 824 mujeres de las cuales se desconoce su paradero.
El estado es el único en México en el que hay un mayor número de mujeres que hombres víctimas de desaparición y el tercero en número de mujeres desaparecidas.
Además, las instituciones recordaron que las empresas tienen la obligación de colaborar con las autoridades “de forma inmediata y sin obstáculos” para facilitar la búsqueda en los casos de desaparición, e instaron a que estas adopten “medidas efectivas” para prevenir la violencia contra las mujeres.
La madrugada del 8 de septiembre, Mara abordó un Cabify al salir de un bar en Cholula para ir a su casa.
Aunque el vehículo llegó a la puerta de su domicilio, la joven nunca descendió de este, y su cuerpo fue hallado una semana después envuelto en una sábana de un motel.
De acuerdo con la Fiscalía de Puebla, el único responsable es el conductor del vehículo, Ricardo “N”, quien en lugar de dejarla en su casa la llevó a un motel cercano donde la violó, golpeó y estranguló.
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