Las solicitudes de asilo en EE UU de los venezolanos han aumentado hasta alcanzar 29.250 peticiones en 2017, más del doble que el año anterior.
De acuerdo con El Nuevo Herald, es una opción para cualquier venezolano que cumpla con la condición de “refugiado”, es decir, quien no puede o no quiere regresar a su país de origen.
“Estas personas deben demostrar cómo sus actividades plantaron oposición al régimen y de qué forma fueron perseguidos”, explicó el abogado de inmigración Marcial De Sautu.
Los “refugiados” deben presentar la solicitud de asilo dentro del período de un año a partir de su última llegada a EE UU.
De Sautu indicó que para garantizar un caso de asilo se debe verificar si las actividades políticas cumplen con los requisitos, así como la evidencia que tienen los ciudadanos como parte de sus argumentos.
“La máxima garantía de éxito es proporcionar pruebas que corroboren sus argumentos y sean consistentes con el testimonio narrado en la entrevista de asilo”, detalló.
Lea la nota completa en El Nuevo Herald.
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