El ministro francés de Interior, Gérald Darmanin, destacó este viernes que desde el comienzo de los Juegos de París 2024 hace una semana se han llevado a cabo 200 detenciones y la delincuencia ha experimentado una fuerte caída debido a la fuerte presencia policial.
Darmanin, que compareció ante la prensa en la ciudad de Saint-Denis, uno de los principales escenarios de París 2024 para hablar sobre la delincuencia. Explicó que se han desbaratado «varios proyectos de acciones violentas» gracias a los servicios secretos y a las informaciones recibidas de otros países.
Pero puntualizó que se trata de «individuos aislados» sobre los que se pensaba que «podían actuar». “Sigue sin haber una amenaza caracterizada» de que ninguna organización estuviera preparando un atentado terrorista.
Precisó que «todos los días detenemos a individuos» que se sospecha que pudieran cometer una acción violenta de forma aislada. A ese respecto precisó que también se han decretado «más de 700 medidas administrativas y judiciales». Estas, por ejemplo, obligan a personas sospechosas a permanecer en régimen de arresto en su domicilio o a fichar en una comisaría.
También hay algunas que están siendo vigiladas a distancia para estar geolocalizadas y evitar que vayan a lugares que se consideran sensibles.
200 detenidos en París 2024
Se han realizado 200 detenciones desde que el 26 de julio se celebró la ceremonia de inauguración de los Juegos. El ministro indicó que en 180 de esos casos, las personas quedaron bajo arresto. No dio indicaciones de cuántas han sido judicializadas ni cuántas resultaron imputadas por algún delito.
Señaló que en esta semana el número de robos con violencia en París y en su área metropolitana bajó 24%, el robo de vehículos 10% y el conjunto de indicadores de delincuencia «han bajado muy ampliamente».
«Son cifras excelentes» que Darmanin atribuyó a «la muy importante presencia de policías y gendarmes» por toda Francia.
Sólo en el área de París están desplegados cada día durante los Juegos más de 30.000 agentes franceses. A ellos se añaden 1.700 de 42 países que han venido a reforzar el dispositivo para misiones especializadas como el desminado, la lucha contra los drones, la protección de los atletas o la atención a los turistas extranjeros.
El contingente español es el más amplio entre las fuerzas de apoyo extranjeras, con 171 agentes de la Policía Nacional y 142 guardias civiles que trabajan en patrullas mixtas, con sus colegas franceses.
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